El fútbol transforma la vida de jóvenes refugiados afganos

El 20 de Junio fue el Día Mundial del Refugiado. La fecha permite tomar conciencia y movilizarse para ayudar a quienes necesitan huir de sus países y empezar una nueva vida en otras naciones. Hoy hay más de 15.000 cristianos que se han convertido en refugiados a causa de la persecución religiosa. Descubre cómo nuestros socios están cambiando la vida de algunos de ellos.

Socios de Puertas Abiertas en Asia Central han encontrado una nueva forma de llegar a los jóvenes refugiados afganos: el deporte. El proyecto de fútbol ayuda a 140 jóvenes que huyeron de Afganistán a encontrar la alegría y a crecer en su fe en Jesús.

"Vimos la oportunidad de tender la mano y ayudar a los refugiados afganos a través del deporte. Su situación es muy difícil. En la región donde vivimos, el gobierno no reconoce la gran cantidad de refugiados que viven aquí y no les proporciona el apoyo social que necesitan", explica el socio Ismael (seudónimo).

Desde 2021, con la toma de Afganistán por los talibanes, miles de afganos, especialmente cristianos, se han visto obligados a abandonar el país donde nacieron y convertirse en refugiados en los países vecinos. Asia Central es una de las regiones que acoge a estos refugiados, sin embargo, crecer lejos de casa, de los amigos y sin saber qué comer al día siguiente hace que el futuro de muchos jóvenes refugiados sea incierto y desesperanzador.

"La impactante realidad es que tres de cada diez niños refugiados dicen que quieren acabar con su propia vida porque pasan la mayor parte del tiempo encerrados y atemorizados", afirma Ishmael.

Por eso, unas 40 niñas se reúnen cinco veces por semana en el césped para quemar energías, divertirse juntas y estrechar relaciones entre ellas. La alegría puede verse en sus rostros y la sorpresa por la libertad de que disfrutan, ya que en Afganistán estaban restringidas en muchos aspectos, incluido el de jugar al fútbol.

El proyecto que empezó con niñas incluye ahora también a más de 100 niños. Cuando llevan una camiseta con el nombre de Messi o Neymar, o simplemente con los colores de Afganistán, durante los partidos vuelven a sentirse normales y en comunidad.

El proyecto ha aportado esperanza a estos jóvenes de muchas maneras. Algunos de ellos han tenido la oportunidad de organizar grupos de estudio de la Biblia e iglesias en sus casas. Pero no se trata sólo de fútbol. Al acercarse a los niños refugiados, los socios locales de Puertas Abiertas establecen una relación de confianza con los padres y también pueden ofrecer ayuda práctica a las familias.

Como los padres no encuentran trabajo, sus hijos no pueden ir a la escuela. “Ayudamos con cestas de alimentos. Con ellas ayudamos a las familias de refugiados a sobrevivir. También distribuimos ropa, cobijas y artículos de higiene. Ofrecemos también asistencia para los casos que necesitan ayuda médica".

Cientos de refugiados se encuentran en el limbo en Asia Central. No tienen dinero suficiente para empezar una nueva vida y, debido a las prisas por huir de Afganistán, tampoco tienen documentos.

La ayuda se ofrece a los cristianos de origen musulmán, pero también a los refugiados musulmanes, que ahora pueden escuchar la buena nueva del Evangelio. Muchos de ellos han entregado su vida a Jesús y quieren ser bautizados.

Ayuda a cristianos refugiados afganos

Cuando van a los campos de refugiados, los cristianos se enfrentan a la falta de una de las necesidades humanas básicas: el agua. Tu donación permite la construcción de pozos artesianos para que nuestros hermanos y hermanas en la fe refugiados tengan agua para beber. ¡Haz una donación!