Jóvenes son blanco de reclutamiento obligatorio en Myanmar

En febrero, la junta militar de Myanmar aprobó una ley que exige el enlistamiento obligatorio de la población civil en el ejército. Los militares anunciaron que aprobarían la Ley del Servicio Militar de 2010, que obliga a los hombres de 18 a 35 años y a las mujeres de 18 a 27 a incorporarse al servicio militar durante dos años.

La ley preocupa a los cristianos perseguidos en Myanmar, ya que amenaza la seguridad de las familias que ya se encuentran en una situación extremadamente frágil desde el golpe militar. Para la junta militar, los seguidores de Jesús son sospechosos de participar en movimientos de oposición al gobierno. Por este motivo, los cristianos de varias comunidades, como en el estado de Chin, están en la mira, al igual que las iglesias.

Tun Mang*, un colaborador local, afirma que "las autoridades locales están controlando las listas de familias, incluso la familia del pastor fue controlada justo después del culto dominical. Nuestro vecino, un joven estudiante, recibió la noticia llorando. Teme que la junta militar se lo lleve y le obligue a unirse al ejército. Tuvimos que consolarlo. Esta ley ha traumatizado a muchos jóvenes”.

Myanmar en crisis

La situación en Myanmar es inestable e impredecible. El anuncio ha aumentado el miedo y el terror entre la población, especialmente entre los jóvenes. Otro socio local, Aung Kyaw*, afirma que "este anuncio podría ser una táctica utilizada por los militares para sembrar el miedo y aterrorizar a la población".

Aung añade que "la ley de enlistamiento obligatorio se mencionó hace años, pero en realidad nunca se aplicó, así que esto podría ser una prueba del gobierno para ver la reacción de la gente". Daisy Hunt*, otra colaboradora local de Puertas Abiertas en Myanmar, señaló que "los adolescentes y los jóvenes de Myanmar tienen pocas opciones. Será aún más difícil continuar los estudios, seguir otras carreras o incluso salir del país para buscar empleo y educación en otros países debido al reclutamiento militar obligatorio".

"Por ello, los jóvenes viven en constante temor y ansiedad. Temen ser detenidos o secuestrados y obligados a cumplir el servicio militar. Están ansiosos porque su futuro parece no tener esperanza. Muchos de ellos se esconden o intentan huir del país", añade Daisy.

"La iglesia quedará vacía sin los jóvenes. Es peligroso para ellos circular en esta época, incluso participar en campamentos y en capacitaciones de liderazgo. Ora para que Dios proteja a los jóvenes de los peligros que aparecen continuamente y para que tengan el valor y la sabiduría necesarios para afrontar las dificultades. Intercede por nosotros para que podamos seguir ayudándolos y discipulándolos en estos tiempos difíciles. Ora también por la seguridad de los hijos de nuestros socios locales que forman parte del grupo de personas vulnerables al reclutamiento forzoso".

*Nombres modificados por motivos de seguridad.