Puertas Abiertas • 7 oct. 2024
En Nepal, algunos cristianos tienen que huir de sus hogares y aldeas debido a las amenazas
¿Qué harías si ya no pudieras adorar o tener comunión con otros cristianos? En América Latina, hay tantas oportunidades para vivir el cristianismo en comunidad que muchas veces no pensamos que podría ser diferente. Sin embargo, en el sur de Asia, la realidad es otra, con cristianos obligados a adorar en secreto debido a amenazas, ataques y la presión de la familia y la comunidad. Esto ocurre en países como India, Laos y Nepal, que presentan niveles extremos y severos de persecución, según el estudio de la Lista Mundial de la Persecución (LMP) 2024. La LMP es una clasificación anual que muestra los países donde es más difícil seguir a Cristo.
En India, cuando una iglesia es atacada, a menudo los cristianos son agredidos. Esto provoca que los cristianos queden mentalmente traumatizados y con miedo de mantener su fe. A menudo, ya no pueden reunirse para orar y tener comunión. Además, son amenazados con violencia y acusados falsamente de conversión religiosa forzada si oran o se reúnen para cualquier actividad cristiana. Es difícil para los pastores reunirse con los cristianos, ya que los líderes son vigilados.
Cuando las iglesias son cerradas, los pastores que dependen de las ofrendas como fuente de ingresos pierden su sustento. Así, se vuelve difícil para el pastor y su familia sobrevivir, y deben buscar nuevas formas de ganar dinero, lo que puede ser complicado si la comunidad se vuelve en su contra. Además, el pastor y su familia viven con el temor de nuevos ataques. En Nepal, los recién convertidos y los miembros de iglesias protestantes enfrentan presión por parte de su familia, amigos, comunidad y autoridades locales. De vez en cuando, grupos radicales hindúes aprovechan la inestabilidad política del país para atacar a los cristianos, quedando prácticamente impunes. Hay informes de iglesias atacadas, agresiones físicas a cristianos y arrestos arbitrarios. Algunos cristianos también han tenido que huir de sus hogares y aldeas debido a las amenazas.
Una amenaza real
En Laos, los encuentros cristianos deben llevarse a cabo sin llamar la atención; técnicamente, son ilegales
En Laos, cristianos han sido expulsados de sus comunidades, sus casas han sido destruidas y han soportado muchas dificultades por seguir a Jesús. A nivel local, las autoridades comunistas monitorean intensamente las actividades religiosas en algunas partes del país. En esas áreas, líderes de las iglesias informan de casos en los que las autoridades locales han cerrado iglesias domésticas. Los encuentros cristianos deben ocurrir sin llamar la atención, ya que técnicamente son ilegales.
Incluso entre las iglesias registradas, las amenazas son reales. Estas son monitoreadas y se estima que el 75% de todas las iglesias evangélicas registradas en Laos deben adorar en casas, lo que las autoridades consideran ilegal. Esto sucede porque muchas iglesias domésticas no registradas se reúnen bajo la autorización de una iglesia registrada a nivel nacional. Pero, oficialmente, las reuniones de adoración solo están permitidas en edificios religiosos aprobados.
Los convertidos del budismo o animismo al cristianismo enfrentan vulnerabilidades adicionales. Como son vistos como traidores a sus comunidades y como personas que han enfurecido a los espíritus, pueden enfrentar presión y violencia de parte de su familia y de las autoridades locales. La familia de un convertido puede ser vista como una molestia en la comunidad local, que a menudo expulsa a los convertidos de sus casas y aldeas.
Ayuda para cristianos afectados por la violencia
Puertas Abiertas ofrece apoyo práctico y espiritual a los cristianos en el sur de Asia que son víctimas de presión y violencia. Tu donación garantiza ayuda de emergencia para los cristianos de la región que han sido afectados por la persecución violenta.
Banco Estado | Nº 3477 1228 854
Misión Puertas Abiertas
RUT 65184324-3
Cuenta vista o Chequera Electrónica
Sucursal Tajamar
Casilla N° 261
Av. Providencia, 1466
Santiago - Chile
Teléfonos:
(+55) 11 99629-9010
(+56) 9 9968- 2161