Puertas Abiertas • 24 abr. 2025
A pesar de vivir los desafíos del desplazamiento, el pastor Paulo continúa su ministerio en Mozambique
Desde 2018, una ola de violencia propagada por grupos extremistas islámicos ha invadido la región norte de Mozambique, cobrando la vida de cientos de personas. Los radicales destruyen todo a su paso bajo el pretexto de establecer un gobierno basado en la sharía (conjunto de leyes islámicas). De esta manera, los cristianos son considerados enemigos que deben ser eliminados, al igual que sus comunidades e iglesias.
En enero de 2024, el Estado Islámico lanzó una campaña contra los cristianos llamada: “Mátenlos dondequiera que los encuentren”. Los extremistas fueron alentados a asesinar a los seguidores de Jesús, lo que resultó en ataques generalizados en el país. Algunas imágenes de muertes y propiedades destruidas fueron publicadas en la revista semanal del grupo extremista, llamada Al-Naba.
Los pastores Antonio* y Paulo* vieron cómo todo cambió con la llegada de los insurgentes islámicos a la provincia de Cabo Delgado, en el norte. “Antes de ese primer ataque, la vida era buena. Las relaciones entre cristianos y musulmanes eran buenas. Vivíamos como amigos en las mismas comunidades”, testifica el pastor Paulo.
Perseguidores al lado
Los soldados del grupo extremista no eran personas desconocidas: algunos hombres vivían en la aldea, y otros son hijos de vecinos, a quienes el pastor vio crecer. Se desilusionaron con promesas vacías de empleo y esperanza en el futuro, y buscan ascender en la vida a través del radicalismo religioso.
En respuesta al crecimiento de los grupos extremistas, el gobierno mozambiqueño ha restringido la libertad religiosa de los cristianos y ha limitado la educación cristiana y las expresiones públicas de fe. Además, muchas comunidades cristianas se encuentran atrapadas en medio de los conflictos entre las fuerzas gubernamentales y los yihadistas. El resultado de tanta violencia es que los sobrevivientes se vieron obligados a huir de sus casas y comunidades.
A pesar de enfrentar persecución, los cristianos del norte de Mozambique se mantienen firmes en Jesús. “Oren para que Dios aumente nuestra fe y comprensión de su Palabra, para que podamos enseñarla a otros”, pide el pastor Paulo.
Apoya a los cristianos atacados en Mozambique
Los cristianos que han sobrevivido a los ataques extremistas buscan ayuda en iglesias locales. Pero muchas comunidades de fe no están preparadas ni cuentan con los recursos necesarios. Haz una donación y capacita a las iglesias mozambiqueñas para que puedan apoyar y entrenar a nuestros hermanos en la fe.
Banco Estado | Nº 3477 1228 854
Misión Puertas Abiertas
RUT 65184324-3
Cuenta vista o Chequera Electrónica
Sucursal Tajamar
Casilla N° 261
Av. Providencia, 1466
Santiago - Chile
Teléfonos:
(+55) 11 99629-9010
(+56) 9 9968- 2161