Celebrando a Jesús en su tierra natal

En Irak, el desplazamiento interno es una táctica deliberada de persecución religiosa para intentar limpiar el país de seguidores de Jesús y privar a los niños cristianos de crecer en su cultura. Con tu apoyo, cristianos como Mimi, de 12 años, y su madre, Nadia, han encontrado nuevas esperanzas para permanecer en el país.

Mimi tenía sólo 4 años cuando la persecución la obligó a abandonar la seguridad del hogar de sus abuelos. Nadia, la madre de Mimi, cuenta la historia. "Hacia las dos de la madrugada, extremistas del Estado Islámico atacaron nuestro pueblo. Incluso después de tanto tiempo, esas voces siguen en mis oídos. Creo que siempre recordaré ese momento, hasta morir", dijo Nadia, temblando. Mimi sólo recuerda el miedo que sintió. Mira el siguiente video y conoce mas detalles de este testimonio.

En cuanto las voces se hicieron más cercanas, la familia decidió marcharse sin llevarse nada. El Estado Islámico estuvo muy cerca. Nadia recuerda su peor pesadilla: "Vi sus caras, daban miedo. Iban todos vestidos de negro, gritaban Allahu Akbar (que significa Dios es grande) desde sus carros y empujaban a la gente con rifles".

Una multitud presa del pánico intentó huir. Mimi y sus hermanas lloraban y gritaban cerca de su madre. Para Nadia, uno de los peores momentos fue ver a sus hijas pedir comida y agua, pero no tener nada que darles. Tras nueve horas de viaje, por fin estaban a salvo.

La decisión de permanecer en Irak

En 2017, con la derrota del Estado Islámico, la familia de Mimi regresó a la llanura de Nínive. Sin embargo, la situación seguía siendo difícil y sus padres luchaban por sobrevivir. La única opción parecía ser abandonar el país. Los abuelos de Mimi, como muchos otros, ya habían emigrado. Incluso hoy, funcionarios del gobierno y ciudadanos se preguntan por qué los cristianos permanecen en Irak. Además de no recibir ninguna ayuda ante la difícil situación económica, las milicias llevan años despojando a los cristianos de sus tierras sin ningún motivo.

Aunque la familia de Mimi quería quedarse, necesitaban un sustento fijo. "Queríamos vivir en Irak, pero no teníamos recursos, entonces pensamos en emigrar. Fue entonces cuando oímos hablar sobre un proyecto de Puertas Abiertas, sobre un microcrédito y pensamos en iniciar una granja", dice Nadia. Mimi tiene un amor especial por gallinas, desde pequeña ha criado algunas y su corazón se alegró al saber que el sueño de criar sus pollitos nuevamente sería posible. 

El sueño que se creó ese día en el corazón de la familia fue posible gracias a tu apoyo. Ahora Mimi tiene un futuro en Irak. La familia comenzó su granja y Dios la ha bendecido tanto que hoy no sólo se mantiene a sí misma, sino que también ayuda a otros empleados a mantener a sus familias. Mimi comparte su alegría en tener esta granja: “cuando mis gallinas ponen huevos que fecundan, se los doy a otras personas para que también puedan tener huevos para su sustento”.

"Si hacemos feliz a la gente, también alegramos el corazón de Jesús", dice Mimi, mientras ayuda a su madre a decorar la casa con una estrella amarilla. “Todos los años celebramos el nacimiento de Jesús ayudando a las personas, celebro con mi familia y después, voy a celebrar con mis gallinas. Como Loulou es mi favorita, la llevo dentro de casa para compartir un tiempo en familia”, concluye la niña.

Transforma la vida de los niños cristianos

La presión y la violencia contra los cristianos comienza en la escuela, donde los niños son insultados y golpeados por sus compañeros y discriminados por los profesores. En un refugio cristiano, los hijos de cristianos perseguidos están a salvo para estudiar y vivir el propósito que Dios tiene para ellos. Con una donación, haces posible que un niño perseguido en Bangladesh tenga vivienda, alimentación y educación formal y cristiana. ¡Dona esperanza!