Oración oculta milagrosamente un entrenamiento cristiano en China

La formación Permanecer firmes ante la tormenta es una de las formas en que los socios locales de Puertas Abiertas preparan a los cristianos perseguidos para soportar la presión en los países incluidos en la Lista Mundial de la Persecución. Li*, un socio local, estaba dirigiendo esta formación durante tres días en el centro de China cuando fue alertado del registro policial.

Al menos 90 cristianos perseguidos se encontraban en el lugar, en busca de formación para atender las necesidades de la próxima generación de la iglesia. Cuando el seminario llegaba a su fin, Li recibió una llamada del responsable del alquiler del local, que le dijo: " ¡Esos tipos [la policía] ya están aquí!".

A los participantes no les sorprendió este hecho. La mayoría ya había vivido la misma situación en otras jornadas de formación. Algunos de ellos ya habían sido interrogados, detenidos o agredidos físicamente en el pasado por participar en este tipo de actividades cristianas.

"Escóndenos bajo tus alas"

"Normalmente, en estas situaciones, la gente huye lo más rápido posible para protegerse. Esta vez, todos decidieron actuar de otra manera. Una persona empezó a orar y los demás se unieron inmediatamente. Oramos juntos, en silencio. Teníamos que estar en silencio, de lo contrario nos encontraría la policía y tendríamos problemas", dice Li.

"Entre susurros, orábamos: Padre nuestro que estás en los cielos, tu nombre está por encima de todos los nombres. Tú haces posible lo imposible. Clamamos por tu protección. Escóndenos bajo tus alas". Li percibió que nadie tenía miedo. Al contrario, oraban con fervor.

"Ese es el resultado que queremos ver en nuestros entrenamientos. Alabamos a Dios por el cambio en los corazones". El ambiente se llenó de paz y amor, el miedo no tuvo espacio". Supieron que sus oraciones habían sido escuchadas cuando las autoridades se marcharon. Los policías sólo se quedaron en la entrada del edificio, no entraron ni revisaron las salas de reuniones. Normalmente, las autoridades revisan sala por sala durante las inspecciones periódicas. Pero no durante esta reunión de formación. Todos estaban a salvo.