Cristiano es encarcelado injustamente en Bangladesh

La persecución contra una pequeña familia de cristianos de origen musulmán ha provocado agresiones físicas y una detención en el norte de Bangladesh. El cristiano Akram, de 39 años, fue detenido hace poco más de un mes en un mercado local, acusado de dos cargos falsos. Desde que se convirtió al cristianismo, la comunidad lo ha presionado para que abandone su fe en Jesús.

Una semana antes de la detención de Akram, su esposa, su hijo y su hija Sephali, de cuatro años, fueron golpeados por vecinos radicales del pueblo porque la niña intentó hablar con una mujer musulmana. Los tres fueron hospitalizados y, cuando pudieron regresar a casa, vieron cómo detenían a Akram, el proveedor del hogar. El padre era el único sustento de la casa, por lo que la familia se ha quedado sin alimentos suficientes y sin seguridad.

La familia también descubrió que las denuncias falsas las habían hecho los vecinos, que los atacaron porque Akram había denunciado violencia física contra su mujer y sus hijos. A pesar de ello, sólo Akram ha sido detenido y los radicales que golpearon a Sephali y a la familia continúan impunes.

Casa apedreada

La primera acusación presentada contra el cristiano era su vinculación a partidos políticos contrarios al gobierno y su movilización activa en actividades antigubernamentales. La segunda denuncia falsa acusaba a Akram de convertir en cristianos a musulmanes pobres y desesperados desde 2007 y de calumniar al profeta Hazrat Muhammad.

Se trata de dos acusaciones graves e infundadas que han hecho que el cristiano pierda su libertad. Un líder cristiano local está buscando un abogado que pueda defender a Akram. Durante este tiempo sin su padre, los niños sienten mucho miedo. A menudo, en mitad de la noche, apedrean el tejado de la casa de la familia y todos se despiertan aterrorizados, más aún sin su padre en casa.

"Los niños lloran todos los días pidiendo a su padre que vuelva a casa". En el momento en que detuvieron a su padre, los niños estaban haciendo los exámenes de fin de curso, pero debido a la crisis familiar no pudieron concentrarse en estudiar. "Vivimos sin comida. Debido a la tensión y al miedo, no podemos comer ni dormir. No sé qué hacer ni adónde ir para que mi esposo regrese a casa. Por favor, ayúdennos", dijo la esposa de Akram.

El supervisor de campo de Puertas Abiertas ha visitado a la familia y se mantiene en contacto con ellos. Nuestros socios locales también han orado por la familia, han entregado artículos de primera necesidad y están colaborando en la búsqueda de asistencia legal para Akram. Contamos con sus oraciones por la familia de Akram y por la liberación del cristiano.

Ayuda para quienes más la necesitan

Puertas Abiertas trabaja en más de 60 países donde los cristianos son perseguidos, como Bangladesh. Con una donación, haces posible que nuestros hermanos y hermanas en la fe que son oprimidos por seguir a Jesús reciban alimentos, agua, Biblias y otras necesidades de emergencia.