Cristiana es obligada a esconder decoración navideña en Irán

Menos de dos horas después de montar su árbol de Navidad, la cristiana Donya (seudónimo) se vio obligada a desmontarlo en Irán. Donya se preparaba para participar de una reunión en línea con un grupo de discípulos cristianos, por lo que montó el árbol como decoración. Sin embargo, en cuanto terminó la llamada, tuvo que desmontar el árbol por el peligro de que alguien viera la decoración y la identificara como cristiana siendo castigada por ello.

"Sólo quería decorar y celebrarlo como todo el mundo, aunque sólo fuera por unas horas", dijo durante la celebración en línea con las luces brillando en el árbol de Navidad de fondo. Mientras personas de todo el mundo se preparan para la celebración del nacimiento de Jesús con regalos, recetas para la cena de Navidad y decoraciones caseras, cristianos como Donya se enfrentan a una oleada de detenciones e interrogatorios en Irán.

La celebración de la venida del Príncipe de la Paz, Jesús, tiene lugar en un mundo que va en dirección totalmente opuesta a un entorno pacífico. Guerras, conflictos, crisis económicas, encarcelamientos, torturas e interrogatorios son algunas de las violaciones de los derechos humanos a las que se han enfrentado los cristianos iraníes. Aun así, la iglesia resiste y proclama la esperanza que sólo Cristo puede traer incluso en tiempos tan oscuros.

Celebración a pesar de las dificultades

No importa el tamaño de la dificultad, Dios sigue presente y envió a su hijo como hombre para nacer, morir y resucitar por nuestra salvación y reconciliación con el padre celestial. Por eso, incluso en medio de la persecución, los cristianos perseguidos como Donya siguen festejando a Jesús y celebrando la Navidad.

Por favor, no dejes de orar por nuestros hermanos y hermanas en la fe este Fin de Año, para que tengan una Navidad de paz y gracia a pesar de la persecución. Ora por aquellos que no tienen que ocultar la alegría que sienten en Navidad, que no pueden decorar sus casas, cantar himnos navideños con libertad porque están sentados bajo interrogatorio, o ir a la iglesia porque están en una celda, encarcelados bajo tortura.

Que nuestros hermanos y hermanas en la fe sientan nuestra alegría y sepan que no están solos, que no han sido olvidados. Que todos los hijos de Dios nunca dejen de buscar la verdadera alegría, la paz que sobrepasa todo entendimiento, y encuentren toda la esperanza, el amor y la alegría que necesitan en Jesucristo, y que muchos que aún no conocen la salvación nazcan de nuevo esta Navidad.

Transforma la Navidad de los cristianos perseguidos  

Pon tu amor en acción. Elige una de las cinco campañas de Regalos de Esperanza y bendice a la parte del cuerpo que se enfrenta a la persecución por amor a Cristo.