Puertas Abiertas • 15 dic. 2024
La caída del régimen de Bashar al-Assad fue una sorpresa en Siria
A medida que Siria sigue lidiando con la caída del régimen de Bashar al-Assad, hay una mezcla de optimismo cauteloso y escepticismo profundo entre los cristianos. Parecen albergar una esperanza frágil para el futuro en medio de años de conflicto, opresión e incertidumbre. Sus historias reflejan a un pueblo que, tras décadas bajo un régimen autoritario, se siente tanto liberado como atrapado, incapaz de desprenderse del pasado mientras enfrenta la incertidumbre del mañana.
"Ahora nos damos cuenta de la presión bajo la que estábamos. Ahora podemos usar la palabra dólar, una moneda extranjera, sin miedo. Estamos experimentando un nuevo sentido de libertad, algo que nunca conocimos", comentó un cristiano sirio. Anteriormente, mencionar el nombre de una moneda extranjera era suficiente para condenar a alguien bajo el régimen de Assad. Es un cambio pequeño, pero significativo para un pueblo acostumbrado a la constante vigilancia, en la que una palabra o un pensamiento casual podían ser peligrosos.
“Necesitamos ser cautelosos”
Sin embargo, esta nueva libertad tiene un costo. Para muchos, el futuro parece muy incierto y el riesgo, demasiado alto. "La visión para el futuro es nebulosa. Estamos enfrentando dos extremos aterradores: el fundamentalismo islámico por un lado y un peligroso vacío de poder por el otro. En los últimos 50 años, nosotros, como pueblo y como instituciones, no hemos sido preparados para un país sin el régimen de Assad", señaló otro cristiano.
Existe una parte de la población menor de 50 años que nunca ha vivido en un país sin un Assad en el poder. El desafío ahora no es solo sobrevivir, sino descubrir cómo reconstruir un país que ha quedado destrozado en los aspectos social, político y económico. Algunos se han adaptado, pero el miedo persiste.
Hay un sentimiento de cautela constante. "Nos tomaron por sorpresa. Nos sentimos inseguros y no sabemos qué hacer. Las cosas parecen tranquilas en la superficie, pero llevará tiempo comprender realmente lo que está sucediendo. Necesitamos ser cautelosos, seguir monitoreando y dar lo mejor de nosotros", comentó otro cristiano, quien describió la transición como despertar de una anestesia solo para encontrar una amarga realidad.
“Queremos creer, pero tenemos miedo”
Para algunos, este enfoque cauteloso significa monitorear las redes sociales para identificar señales de extremismo y cambios políticos. Observan cuidadosamente los discursos que puedan sugerirlo. Por otro lado, hay reuniones entre líderes de la oposición y representantes de la iglesia con promesas de seguridad e inclusión para los cristianos en Siria. Sin embargo, muchos no están dispuestos a confiar plenamente en esas garantías. "Queremos creerles, pero tenemos miedo. Sentimos que los cristianos en Siria están siendo utilizados como una carta política para asegurar una buena relación con Occidente", admitió un cristiano.
El sentimiento de ser manipulados, de tener su lealtad y sus miedos utilizados por varias facciones, es profundo. Por ello, sus oraciones son esenciales en este momento. Clama por la paz, por los nuevos líderes del país y especialmente para que la iglesia permanezca firme en la región. Conoce diez formas de orar por Siria en el link.
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