La realidad de los cristianos ex musulmanes en África

Muchos de los que dejaron el islam para seguir a Cristo se encuentran en África Subsahariana. Los países de esta región que están en la Lista Mundial de Persecución 2019, que clasifica a los 50 países con mayor persecución de cristianos, son Somalia, Sudán, Eritrea, Nigeria, Malí, República Centroafricana, Etiopía y Kenia. Pero eso no significa que en otros países de esta región no sean perseguidos los cristianos ex musulmanes.

Puertas Abiertas monitora países más allá de los 50 en la Lista y hay algunos clasificados como “Países en Observación” por causa de la persecución. La mayoría de ellos están en África subsahariana. Ellos son: Yibuti, República Democrática del Congo, Camerún, Tanzania, Níger, Chad, Burkina Faso, Uganda, Guinea, Sudán del Sur, Mozambique, Gambia, Costa de Marfil, Burundi, Angola, Togo y Ruanda. Nuestro trabajo también es socorrer a los hermanos de todas estas naciones que, además de tener que lidiar diariamente con el hambre, la miseria, la muerte y la violencia, también son perseguidos por causa de su amor por Dios.

El cristianismo llegó al África subsahariana mucho antes del Islam. Pero en el siglo VII, los ejércitos musulmanes cruzaron el Mar Rojo y tomaron El Cairo de las tropas bizantinas. Desde allí se trasladaron al Mediterráneo y se extendieron por África a través del comercio y la predicación del islamismo.

El cristianismo crece en el árido suelo de África

El gran cambio se produjo a partir del siglo XX. Hasta 1900, la mayoría de los africanos practicaban religiones tradicionales, pero en un poco más de un siglo, el panorama religioso cambió dramáticamente. En mil años de historia, el número de musulmanes en África subsahariana aumentó de 11 millones a 234 millones el 2010. La buena noticia es que el número de cristianos creció aún más rápido: de 7 millones a 470 millones.

Especialmente en la región del Cuerno de África, la persecución contra las comunidades de ex cristianos musulmanes es muy alta. A menudo, en esta región ser cristiano es sinónimo de martirio. En Eritrea, los cristianos atrapados adorando a Cristo fuera de una de las tres iglesias reconocidas (ortodoxa, católica y luterana) sufren durante años en prisión bajo circunstancias terribles. En Somalia, los cristianos a menudo son martirizados.

Como resultado, Puertas Abiertas tuvo que reubicar el trabajo allí varias veces a medida que se descubrieron nuestras redes de trabajo y falsos convertidos se infiltraron en la iglesia para traer destrucción. En el sureste de Etiopía (la región fronteriza somalí), fuimos testigos de la persecución de musulmanes radicales en un intento de hacer que negaran a Cristo. Esto ha llevado a los cristianos a quedarse sin hogar, solos y sin esperanza.

Aun así, el evangelio está creciendo y Dios está construyendo la iglesia en el Cuerno de África, incluso en áreas dominadas por el islam. Sin embargo, tienen que reunirse en secreto. Es decir, se encuentran a escondidas o son parte de una iglesia subterránea, ya que muchos de ellos viven aislados. En estas reuniones, sin instrumentos ni himnarios, cantan alabanzas a Dios. ¡Glorifica al Señor por la fe de nuestros hermanos y ora para que, a pesar de las dificultades, su fe en Jesucristo sea más fuerte que cualquier obstáculo!