Joven cristiana es interrogada en Cuba

Conoce hoy la historia de Ingrid*, una voluntaria de Puertas Abiertas que fue interrogada y acusada por el gobierno cubano de apoyar a terroristas. Incluso en medio de una intensa persecución, Ingrid no dejó de orar y en la intercesión encontró la fuerza para resistir.

Ingrid descansaba en cama de un fuerte resfriado cuando sonó el teléfono a mediados de junio de 2023. Era la policía cubana que pedía a la joven, por primera vez, que fuera a la oficina del gobierno al día siguiente. Cuando llegó a la oficina, una mujer y un hombre la estaban esperando y la condujeron a una habitación completamente cerrada y sin ventanas para comenzar el interrogatorio.

"Sabes por qué estás aquí, ¿verdad? Deberías saberlo", le dijeron. Los agentes le enseñaron dos fotos. En la primera, Ingrid estaba sola y en la segunda estaba con Josué*, un pastor y socio de Puertas Abiertas que viajó a Cuba en 2022 para visitar y animar a los cristianos perseguidos. Ingrid lo conoció en esa visita, a través de un socio local de Puertas Abiertas.

Intensa presión

Desde entonces, es voluntaria de Puertas Abiertas y realiza informes sobre todas las actividades de campo en Cuba. Josué también fue investigado hace un año acusado de participar en "organizaciones terroristas", pero tras una hora de interrogatorio y muchos intentos fallidos de obligarlo a aceptar los cargos, fue puesto en libertad.

En cuanto a Ingrid, el interrogatorio duró una hora y media, sin contar las pausas durante las cuales los agentes abandonaron temporalmente la sala. Le preguntaron si conocía a Josué y confirmó que sabía que era un pastor que había viajado a Cuba por turismo y que había visitado a algunos pastores durante su estancia en el país.

Los agentes se sintieron frustrados por su respuesta y se pusieron agresivos. Llamaron mentirosa a Ingrid y amenazaron con castigar a la cristiana con una pena de 15 a 25 años de cárcel si no decía la verdad.

"La policía dijo que Josué se hacía pasar por pastor, pero que en realidad formaba parte de una organización terrorista que quiere desestabilizar la seguridad del país y que yo lo encubría", cuenta Ingrid. A pesar de negar las acusaciones, la policía siguió atacando y presionando a la joven para que reconociera las acusaciones.

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*Nombres modificados por motivos de seguridad.