¿Cuál es el origen de los conflictos entre Israel y Palestina?

Descubre cómo comenzó la lucha por el territorio y las consecuencias para los cristianos de la región

Puertas Abiertas • 28 jun. 2021


Los cristianos viven en medio de los conflictos entre israelíes y palestinos (foto representativa)

Los cristianos viven en medio de los conflictos entre israelíes y palestinos (foto representativa)

Para entender el origen de los conflictos entre Israel y Palestina es necesario retroceder un poco en la historia. En el año cero del calendario cristiano, la región donde hoy se encuentra Israel estaba habitada por judíos, bajo la dominación del Imperio Romano. Pero 70 años después, la población se rebeló contra Roma y los judíos perdieron y fueron expulsados del territorio.

Sin embargo, 60 años después, los judíos intentaron retomar el territorio una vez más, y fueron derrotados por el emperador romano Adriano. Entonces, el lugar pasó a llamarse Palestina, en homenaje al pueblo filisteo, enemigo de los judíos desde los tiempos del Antiguo Testamento. Pronto, todos los que residían en la región fueron conocidos como palestinos, independientemente de si eran musulmanes, cristianos o judíos.

En 1453 se produjo la caída del Imperio Romano, luego la región pasó a ser gobernada por el Imperio Bizantino hasta la conquista del Imperio Turco-Otomano, que mantuvo el control hasta el final de la Primera Guerra Mundial. Pero como los otomanos de origen musulmán lucharon junto a los alemanes y perdieron la guerra, el imperio se disolvió y Palestina fue ocupada por los británicos en 1917.

¿Por qué se considera a Jerusalén la Ciudad Santa?

Jerusalén tiene un papel histórico y sagrado para los seguidores del judaísmo, el cristianismo y el islam. La ciudad mencionada 632 veces en la Biblia fue la capital del reino de David en el siglo X a.C., sede del Templo de Salomón y del Segundo Templo, construido tras el cautiverio babilónico. En la ciudad se encuentra también el Monte del Templo, Moriah, la región donde Abraham sacrificaría a Isaac según la cultura judeocristiana. Sin embargo, para los musulmanes, el patriarca ofrecería a Alá el primogénito que tuvo con la esclava Agar, Ismael.

La ciudad de Jerusalén es sagrada y disputada por judíos, cristianos y musulmanes.

Otro lugar histórico judío muy importante situado en Jerusalén es el Muro de las Lamentaciones, que rodeaba el segundo templo destruido por los soldados romanos del general Tito en el año 7. Para los cristianos, hay otros lugares importantes como la Iglesia del Santo Sepulcro, donde Jesús fue enterrado y resucitó. Otros lugares visitados son el Cenáculo, donde se cree que tuvo lugar la última cena, y el Gólgota, donde tuvo lugar la crucifixión de Cristo.

Los musulmanes consideran Jerusalén como la tercera ciudad santa, tras La Meca y Medina, donde Mahoma recibió las revelaciones del Corán. Según la tradición islámica, la noche de la Ascensión del profeta fue transportado físicamente desde La Meca con el ángel Gabriel hasta Jerusalén en una sola noche. Por esta razón, la mezquita de Al-Aqsa y la Cúpula de la Roca se construyeron en el Monte del Templo, desde donde Mahoma habría partido en su viaje al cielo, cuando recibió la orden de orar cinco veces al día.

¿Cuándo empezaron los conflictos actuales?

Tras la caída del Imperio Otomano, los británicos ocuparon y prometieron el territorio tanto a los judíos como a los palestinos. Ambos pueblos querían crear sus respectivos países en el mismo lugar. Para tensar la situación, surgió el sionismo, cuando el periodista judío-húngaro Theodor Herzl propuso la creación de un Estado hebreo en Palestina como solución a la creciente aversión a los judíos en Europa.

Generaciones de judíos se disputan el territorio palestino en los tribunales israelíes.

En esta época, los judíos comenzaron a regresar a Palestina, hasta el punto de que la población judía de Jerusalén pasó de 6 mil personas en 1850 a más de 32 mil en 1922. Sin embargo, los palestinos de origen árabe ya se encontraban en la región y esperaban la creación del país, como habían prometido los británicos. En consecuencia, en 1930 se inició un movimiento nacionalista árabe que agravó los conflictos entre ambos pueblos.

En 1947, los británicos cedieron el control de Jerusalén a las Naciones Unidas (ONU). Entonces, la disputa por el territorio terminó en una asamblea el mismo año, que decidió la división de Palestina entre árabes y judíos, pero Jerusalén permanecería bajo el dominio internacional. Sin embargo, los estados árabes no aceptaron la decisión, y cuando se creó el país Israel en 1948, estalló la primera guerra árabe-israelí. Tras los conflictos, los palestinos perdieron gran parte de la región y Jerusalén se dividió entre israelíes y jordanos.

¿A qué se debe la actual ola de violencia entre judíos y palestinos? 

La nueva ola de violencia entre judíos y palestinos tiene su origen en las amenazas de desalojo de familias palestinas de Sheikh Jarrah, un barrio situado fuera de las murallas de la antigua Jerusalén. El territorio está siendo disputado en los tribunales de Israel por judíos que afirman haber comprado y vivido allí en 1870, en la época gobernada por el Imperio Turco Otomano.

En 1948, Jordania ocupó Jerusalén Este y construyó, junto con ACNUR (Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados), casas para 28 familias de refugiados palestinos en la zona. Sin embargo, los beneficiarios nunca obtuvieron la posesión definitiva del terreno. Luego, en 1967, cuando Israel ocupó Jerusalén Este, los propietarios judíos emprendieron acciones legales para recuperar el terreno.

¿Cómo es la situación de los cristianos palestinos?

Todas las comunidades cristianas tienen dificultades para viajar debido a las restricciones impuestas por las autoridades israelíes. También se enfrentan a dificultades económicas y sociales porque viven en ocupaciones. Los líderes cristianos son acosados tanto por los extremistas islámicos como por los judíos. También hay prejuicios de las iglesias históricas hacia los cristianos de denominaciones más recientes.

En la región de Gaza, la situación de los cristianos es aún más delicada, ya que el territorio está gobernado por el partido político Hamás y Cisjordania por Al Fatah. Por lo tanto, la conversión de un musulmán al cristianismo es crítica y puede provocar la persecución de la familia, la comunidad y las autoridades.

El Hermano Andrés participando en la inauguración de una iglesia en la región de Gaza en 2005.

Según el Hermano Andrés, fundador de Puertas Abiertas, los cristianos palestinos están resentidos con la iglesia occidental: "Cuando empecé a hablar con estos cristianos, me expresaron su dolor, especialmente el de no ser reconocidos por la iglesia occidental como parte del cuerpo de Cristo".

Según los hermanos palestinos, los cristianos de Occidente están obsesionados con Israel y su lugar en la profecía bíblica, ignorando por completo a la iglesia del país, formada por un 85% de cristianos árabes.

También lamentan que los cristianos occidentales ignoren el trato, a menudo inhumano, que el gobierno israelí dispensa a los palestinos. "Siempre parece haber una simpatía por Israel, y tienen la razón cuando esa nación es víctima de un ataque terrorista, pero los actos brutales de Israel contra los palestinos tienden a ser excusados o a pasar desapercibidos. Los cristianos palestinos son a veces víctimas de este fuego cruzado, pero no tienen a nadie que los defienda o apoye", explica el Hermano Andrés en el libro "El contrabandista de Dios - desafiando los límites de la fe".

Peticiones de oración

  • Ora por la paz entre Israel y Palestina, y para que los cristianos locales puedan dar testimonio del amor de Jesús a todos.
  • Pide que los cristianos palestinos sean apoyados por Dios en todas sus necesidades y sean tratados con respeto y justicia por las autoridades israelíes y palestinas.
  • Ora para que más musulmanes y judíos tengan un verdadero encuentro con Cristo y se conviertan en discípulos locales.

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