La persecución de los cristianos en Oriente Medio
La presión que enfrentan la mayoría de las mujeres en Medio Oriente y el Norte de África está directamente relacionada con el valor o la importancia que reciben culturalmente. A las niñas a menudo se les dice que deberían avergonzarse de sí mismas por no ser niños o que no son dignas de la inversión de sus padres.
En las zonas más pobres de mayoría musulmana, las niñas no son criadas por sus padres, sino por alguien de la familia. ¿Cómo no afectaría esto a las mujeres en la edad adulta?
Un informe de 2022 afirma que solo alrededor del 19% de las mujeres mayores de 15 años trabajan en Medio Oriente y África del Norte, en comparación con aproximadamente el 50% en Europa y Asia Central y el 57% en América del Norte. Esta información es importante porque, si una mujer no trabaja, no tiene ingresos ni independencia financiera. En otras palabras, cuando una mujer musulmana se convierte, su familia puede rechazarla y expulsarla de su casa y queda completamente desabrigada.
Conoce a Simin
Simin (seudónimo) es una cristiana de Irán que fue arrestada, separada de su hija de dos años y tuvo que abandonar su país. En el país donde vive actualmente fue contactada por un empleado de Puertas Abiertas. Participó en capacitación de discipulado, que además de ayudar a las mujeres a superar el dolor de la persecución, también prepara a las participantes para servir a los demás.
Durante el transcurso del año de capacitación, Simin comenzó un ministerio en línea. Se sintió alentada por Dios a apoyar a otras mujeres que habían experimentado persecución. “No estoy en mi zona de confort, pero entiendo el dolor de estas mujeres. Quiero consolarlas y servirlas”, comparte. A través de su ministerio en línea, Simin enseña la Biblia a mujeres iraníes, haciéndolas entender lo que Dios dice sobre ellas, además de prepararlas para liderar iglesias locales.