Puertas Abiertas • 13 jul. 2021
Para evitar la difusión del evangelio en Vietnam, los cristianos son vigilados por las autoridades.
Lien*, de 40 años, es un pastor del noroeste de Vietnam que pastorea una pequeña iglesia del pueblo. El Señor ha utilizado a Lien y su ministerio para mostrar su gracia y poder milagroso a los enfermos y a los pobres. Gracias a ello, muchos han conocido a Cristo y se han convertido. Pero a medida que el número de cristianos comenzó a aumentar, la persecución contra él también creció.
A mediados de mayo de este año, las autoridades locales fueron a la iglesia de Lien y confiscaron todo el material bíblico que encontraron, como Biblias, devocionales y manuales de formación de líderes cristianos. También hicieron una lista con los nombres de cada miembro de la iglesia y los visitaron individualmente en sus casas para prohibirles asistir a la iglesia.
Todos los días, la policía también va a la casa de Lien para vigilarlo, ya que le han prohibido realizar los servicios dominicales y otras actividades de la iglesia, como la evangelización.
A finales de mayo, las autoridades locales detuvieron a Lien en su domicilio y lo detuvieron durante una noche y un día en la comisaría. Ellos lo obligaron a firmar una declaración que le impide predicar, hacer estudios bíblicos y evangelizar. Esta era la única forma de obtener su libertad.
Las autoridades también le informaron a la familia que ellos dejarían de recibir los subsidios del gobierno para los pobres: educación gratuita para sus dos hijos, ayudas a la agricultura y a la plantación de arroz, y su salario anual de aproximadamente 870 dólares con la intención de “priorizar y proteger" la fauna y flora de la región. Es decir, toda fuente de sustento les fue retirada por amar a Jesús.
Debido a las restricciones a causa del COVID-19, Lien tampoco puede salir a trabajar, lo que se ha convertido en un reto adicional a su situación actual. Gracias al apoyo y a las contribuciones de la iglesia libre, los socios locales de Puertas Abiertas han conseguido dar soporte al cristiano y a su iglesia.
*Nombre alterado por seguridad.
Fortalece a los cristianos en Vietnam
Ser cristiano en Vietnam es convertirse en enemigo de la propia familia, las autoridades y la comunidad. En el país, el cristianismo es visto como una amenaza para el orden nacional por las autoridades y como una religión extranjera por el pueblo. Por ello, nuestros hermanos y hermanas necesitan apoyo. Tu donación ayuda a mantener el proyecto llevado a cabo a través de socios locales en Vietnam, donde los cristianos reciben formación, discipulado, materiales cristianos y ayuda socioeconómica.
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