Ore por los jóvenes de Egipto

Esta noticia nos lleva a reflexionar sobre los jóvenes guerreros que luchan para mantener la iglesia de Cristo viva en Egipto, y también en los países donde ser un cristiano es un crimen y hasta una ofensa a los gobiernos que instituyeron el islamismo como la religión oficial del Estado. Hay también las repúblicas que declaran la libertad de religión en teoría, pero en la práctica persiguen a quien decide seguir el cristianismo. Los jóvenes cristianos que enfrentan estos conflictos entre la iglesia y el Estado insisten en predicar el evangelio, aun corriendo un risco de muerte.

En Egipto, por ejemplo, donde los niños y jóvenes de familias cristianas son blanco de secuestro, los jóvenes van a las calles para evangelizar los musulmanes, levantando banners con mensajes de amor, divulgando por las plazas y hasta entregando dulces, como sucedió en la última fiesta de Ramadán. Ellos creen que el mensaje de amor de Cristo puede impactar los corazones de los egipcios. Una de las frases de un banner decía: “Yo soy un cristiano y amo todos los musulmanes”. Según la ley egipcia, un cristiano puede ser inmediatamente preso y acusado de insultar la religión del Estado, pudiendo cumplir pena en la prisión.

Sin embargo, la juventud cristiana egipcia cree que tiene la misión de guardar la verdadera esperanza de la humanidad, que es Jesús, entonces los jóvenes no se importan de correr este riesgo. Es en las calles que ellos se sienten necesarios, por eso, enfrentan tantos desafíos. Para la sociedad, ellos son considerados infieles y traidores, pero para Dios, ellos son guerreros que luchan con la única arma que poseen: la Biblia. Ore por estos jóvenes.