Misioneros son blanco de bandas criminales en Haití

El 16 de septiembre, 16 misioneros norteamericanos y un canadiense fueron secuestrados con sus familias en Haití. Esta acción no fue algo inesperado, sino que revela lo que viene ocurriendo desde hace tiempo en Haití: los seguidores de Jesús y los líderes cristianos se enfrentan a la persecución de grupos criminales y extremistas en el país. 

Marcelo y su familia se dirigían a realizar una visita rutinaria a una mujer a la que ayudaban en Puerto Príncipe, la capital de Haití, cuando un grupo de hombres fuertemente armados los detuvo.

El objetivo principal de los hombres parecía ser el conductor de un camión grande que querían utilizar para bloquear la carretera. Miraron el automóvil de Marcelo, pero siguieron caminando hacia el otro vehículo.

Al volante, Marcelo vio cómo la banda robaba a un camionero. A continuación, lo dejaron a un lado de la carretera; en este caso, no estaba claro si el hombre también sería secuestrado.

Marcelo, es un misionero cristiano brasileño que vive en Haití desde hace tres años, se sintió aliviado de no ser objetivo de secuestro. "Estos hombres estaban armados hasta los dientes, estuvieron muy cerca de nosotros, pero Dios nos salvó de ser secuestrados", dijo durante una entrevista con Puertas Abiertas. "Dios nos ha protegido en muchas otras situaciones similares que hemos enfrentado; no es raro ver a estas bandas deambulando por ahí cometiendo todo tipo de delitos", añadió.

Según el periódico The Guardian, que ha calificado a Haití como "la capital mundial del secuestro", en las zonas controladas por las bandas, "a menudo se detiene a los residentes y se les pide un rescate antes de secuestrarlos". Así que, posiblemente, el conductor del camión no cumplía los "requisitos" de los delincuentes para lo que ellos podrían considerar un "secuestro probablemente exitoso".

Un país a merced de las bandas violentas

La vida en Haití, el país más pobre de la región de América Latina y el Caribe, es terriblemente difícil. Día tras día, la gente lucha por poner comida en la mesa, encontrar un trabajo, enviar a sus hijos a la escuela y protegerse de los brutales actos de violencia perpetrados por estas peligrosas bandas.

Los datos publicados por una organización local sin ánimo de lucro, el Centro de Análisis e Investigación de los Derechos Humanos, muestran que este año se han producido al menos 628 secuestros en Haití, lo que supone un aumento 3 veces mayor con respecto al año pasado; una media de 2 secuestros al día hasta ahora. Y aunque el reciente secuestro de 17 misioneros estadounidenses y canadienses ha atraído la atención de los medios de comunicación de todo el mundo, el hecho es que los haitianos son secuestrados todos los días.

La presencia omnipresente de estas bandas criminales está en todas partes y en un número significativo. Según el Servicio de Vigilancia de la BBC, hay cerca de 162 bandas activas en el país, y el número de miembros de las mismas asciende a 3.000. Además, se calcula que 20.000 haitianos han huido de sus hogares debido a la violencia de las bandas.

Peticiones de oración 

• Ora por los líderes cristianos y los creyentes de Haití para que Dios los proteja de los ataques de las bandas criminales y los mantenga firmes en su fe. 
• Intercede por los miembros de las bandas, para que conozcan la palabra de Cristo y den testimonio de las buenas obras del Señor.  
• Clama para que Dios derrame sabiduría sobre los líderes del país para gestionar los conflictos y la seguridad de Haití.