Puertas Abiertas • 9 abr. 2025
Socios locales continúan ayudando a los cristianos afectados por los terremotos aún frente a dificultades
Después de casi once días, Myanmar sigue sufriendo los efectos del devastador terremoto que sacudió al país, sin señales de que la vida regrese a la normalidad. La destrucción provocada por los sismos dejó a muchas personas sin hogar, heridas y en duelo. La falta de necesidades básicas como alimentos, agua y suministros médicos ha agravado aún más la situación.
Muchos países, agencias internacionales y organizaciones independientes se están movilizando para brindar ayuda a las víctimas de los terremotos en Myanmar. A pesar de la situación actual del país, según informes de los medios, los militares continúan lanzando ataques. Se ha informado que también están confiscando por la fuerza suministros de ayuda destinados a las víctimas del terremoto en Sagaing.
Esto ha incrementado aún más el miedo y la paranoia entre la población, que ya enfrenta estrés mental y traumas. Mientras tanto, el periódico The Guardian informa que la junta militar está bloqueando la ayuda en las zonas afectadas por el terremoto, donde la población necesita urgentemente asistencia, por temor a que esta sea utilizada por las Fuerzas de Defensa del Pueblo (PDF, por sus siglas en inglés), el grupo opositor al gobierno.
El consuelo de las oraciones
“No podemos decir con certeza si los militares están bloqueando la ayuda, pero han anunciado que toda la ayuda debe pasar por ellos. Hemos escuchado de algunos cristianos que han logrado entregar ayuda, pero también hubo varios que fueron detenidos por los militares por razones que aún no nos quedan claras”, informa Ming Naing, socio local de Puertas Abiertas.
Según socios locales, la situación está haciendo extremadamente difícil llegar hasta los cristianos afectados por los terremotos. “Ahora, todas las agencias de ayuda deben solicitar cartas oficiales del gobierno estatal, lo cual es muy complicado. De Yangon a Mandalay, todos los vehículos que transportan ayuda están siendo cuestionados y detenidos. Es muy difícil alcanzar a los cristianos necesitados”, relata Mary*, una cristiana local.
Las lluvias fuera de época en algunas regiones del país también están complicando los esfuerzos de asistencia y aumentan el riesgo de propagación de enfermedades en los refugios improvisados de los desplazados. Además, el terremoto dañó muchas carreteras y caminos, lo que representa otro desafío para los socios locales al momento de transportar materiales de ayuda a las zonas más afectadas. A pesar de estas situaciones de riesgo, nuestros socios locales están comprometidos y encontrarán la manera de llegar hasta los afectados con la ayuda y las oraciones necesarias en Myanmar.
Lin*, una cristiana embarazada, da testimonio del consuelo que sintió gracias a las oraciones. Ella experimentó estrés mental debido al terremoto, lo cual le afectó físicamente y la preocupó, tanto a ella como a su esposo, el pastor Noah*, por la salud del bebé. Pero Lin expresa su gratitud por las oraciones recibidas: “Me sentí animada por su visita y oraciones. El médico dijo que mi bebé está bien; muchas gracias.”
Lin y el pastor Noah* participaron hace unos meses del entrenamiento para fortalecimiento familiar y matrimonial realizado por Puertas Abiertas con cristianos perseguidos en Myanmar.
*Nombres cambiados por motivos de seguridad.
Ayuda de emergencia para cristianos en Myanmar
Miles de personas murieron o resultaron heridas durante los terremotos que sacudieron Myanmar. Muchos cristianos perdieron sus hogares y ahora viven en las calles. Dona y envía ayuda de emergencia, como alimentos y agua, para los cristianos afectados por los terremotos.
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