Puertas Abiertas • 8 may. 2022
Nigeria es el país donde se producen más muertes de cristianos, por lo que los hermanos en la fe viven con miedo a la violencia constante.
Hoy es el Día de la Madre y Puertas Abiertas desea que todas sean bendecidas por Dios con sabiduría, ánimo y amor. Por esta razón, compartimos el testimonio de una madre cristiana en Nigeria y sus desafíos para criar a sus hijos en los caminos del Señor.
Cecelia supo que su sueño de tener una familia feliz no sería más una realidad cuando su esposo Solomon fue asesinado en 2011 en la ciudad donde vive actualmente la cristiana. "Mi esposo murió un domingo. Por la mañana, fue al mercado. Su primo había fallecido y yo estaba preparando comida para llevarle a la familia en luto", dice la cristiana.
Cecelia y sus hijos esperaban en casa del primo de Solomon cuando se produjo un ataque contra cristianos en la ciudad: "Empezamos a oír disparos por todas partes. También había mucho humo. En la última llamada que tuvimos, Salomón me dijo que volviera a la casa y cuidara de los niños. Me dijo que todo en la ciudad estaba en llamas, pero que debía mantener la calma. Mi corazón estaba preocupado, me senté e intenté llamarle varias veces pero no respondía el teléfono".
Al día siguiente, Cecelia y los miembros de su familia se enteraron de que su esposo y padre había muerto y que el cuerpo había sido trasladado a un hospital cercano. Cuando la cristiana llegó al lugar de los hechos, un médico le dijo que los restos de Solomon ya no estaban allí, se marchó llevando sólo la blusa de su esposo y volvió a casa.
Esa tarde, una persona llegó con una pala para enterrar al líder de la familia y Cecilia empezó a gritar y a llorar por la pérdida de su compañero. "Cuando mi esposo estaba vivo, vivíamos en paz. Era agricultor y cubría todas nuestras necesidades", declara. Según la cultura local, una viuda se convierte en inferior porque ya no tenía un hombre que cuide de ella y de sus hijos.
En el siguiente video, conoce a Sele, el hijo de 13 años de Cecelia nos comparte su testimonio.
Firmes en Cristo a pesar de la tormenta
Cecelia no tuvo elección, asumió la responsabilidad de mantener a sus hijos y ahora ellos debían ayudarla a cultivar la tierra. Sin embargo, los ingresos de la familia no son suficientes para pagar los gastos escolares de los niños. Por lo tanto, su futuro era seguir trabajando la poca tierra que tenían, marginados tanto económica como socialmente. Pero Dios tenía un plan mayor para la familia.
Puertas Abiertas conoció el testimonio de Cecelia y sus hijos y gracias a los socios de todo el mundo pudo ayudarles. "Doy gracias a Dios por Puertas Abiertas. Siempre me visitan y me ayudan con los gastos y con la escuela de mis hijos", comparte la cristiana.
La cristiana y sus hijos sueñan con una vida mejor y trabajan para ser testigos vivos del amor de Dios en Nigeria, a pesar de la violencia que no hace más que aumentar en el país. Le preguntamos a la cristiana cuál es la razón de tal esperanza y con una sonrisa nos comparte: "Decidí aferrarme a Jesús. "
Un regalo especial en el Día de la Madre
Cecelia es la madre de Sele, un adolescente de 13 años que perdió a su padre cuando tenía dos. Juntos luchan por seguir a Jesús y cumplir los sueños que Dios ha puesto en sus corazones. Envíales una tarjeta con mensajes de fuerza y ánimo, esta es una forma de servir a nuestros hermanos.
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