Los padres de Leah Sharibu esperan encontrarse con su hija nuevamente

Hace dos años, el 19 de febrero de 2018, Leah Sharibu fue secuestrada con un grupo de 111 niñas en la escuela. Todo sucedió en la ciudad de Dapchi en el estado de Borno, Nigeria. Después de un mes en cautiverio, el resto de las colegas cristianas fueron liberados, pero la niña permaneció en cautiverio por negarse a convertirse al islam. Desde entonces, su madre Rebecca, y su padre Nathan y su hermano Donald han estado esperando noticias sobre el secuestro de Leah. La angustia de esperar hizo que la familia Sharibu no quisiera dar más entrevistas a los innumerables periodistas que han llamado todos los días para obtener información.

Puertas Abiertas ha apoyado a esta familia en oración y estuvo promoviendo una campaña de mensajes para que los cristianos de todo el mundo alentaran a los padres de la niña. Una de las personas que acompaña a la familia Sharibu es el pastor Gideon Para-Mallam. El líder cristiano habló con nosotros y nos contó sobre la situación familiar y las negociaciones para la liberación de Leah. Esta es parte de la entrevista que tuvimos con él:

Puertas Abiertas: ¿Cómo te uniste a la familia Sharibu y cuál ha sido su trabajo con ellos?

Pr. Gideon: El 21 de marzo de 2018, vi en las noticias en la televisión que Rebecca estaba desmayada, mientras los demás padres celebraran la liberación de sus niñas que habían sido secuestradas con Leah. Al ver esto, sentí que el Señor me decía: "Gideón, debes defender a esta familia, defender a Leah Sharibu". Así que me puse en contacto y brindé asistencia pastoral y apoyo a todos, no como pastor local, sino como un hermano preocupado por la Iglesia perseguida en Nigeria.

Mi esposa y yo comenzamos a pensar en el apoyo práctico que podríamos brindar a los Sharibu y decidimos invitarlos a quedarse con nosotros. No podemos simplemente orar a distancia, ellos necesitan que caminemos a su lado para que sepan que no están solos. También hemos creado una comunidad de apoyo para ellos. Cuando estamos juntos, oramos y siempre tratamos de recordarles que los cristianos en todo el mundo y el mismo Dios no han olvidado la lucha que están viviendo. Porque es cierto que personas de todo el mundo están orando por ellos y por el regreso de Leah.

PA: ¿Cómo es la situación de Nathan y Rebecca en medio de incertidumbres de información sobre la situación actual de Leah

Pr Gideon: Rebecca está bien, en la medida de lo posible, ya que es difícil estar feliz sabiendo que tu hija todavía está con los secuestradores después de dos años. No sabemos dónde está y qué le pasó exactamente a Leah. Esa incertidumbre es difícil. A veces, la madre mira hacia otro lado y puedes ver que está físicamente presente, pero su mente y corazón están con su hija. Nathan me llama casi todas las semanas con la expectativa de buenas noticias de Leah. Esta es la parte más difícil para mí, no poder darle la información que desea. Oro para poder ser el mensajero de noticias agradables pronto.

PA: Hay información de que Leah estaba casada y tenía un bebé. ¿Puedes confirmar esta noticia? 

Pr Gideon : Vemos esta información como rumores, porque no fue confirmada por fotos o video. Desafortunadamente, esta no es la primera vez que aparecen rumores y debemos ser cuidadosos y atentos al compartir esta información; puede desmoralizar fácilmente a la familia Sharibu, que ya está traumatizada. Cuando escuché esta historia, no sabía si compartirla con los padres de la cristiana o no. El padre aceptó la información, pero sabríamos que para Rebecca sería difícil. Entiendo que estos rumores son interesantes, pero debemos ser igualmente conscientes de cómo esto afectará a la familia.

Peticiones de oración

• Ora para que el Señor fortalezca y libere a Leah en su tiempo y que el gobierno se interese en las causas de otras personas que están cautivas en la misma situación.
• Intercede para que Dios pueda mover el espíritu de los comandantes y soldados de Boko Haram, para ver y reconocer quién tiene la verdadera autoridad.
• Clama por Nathan, Rebecca, Donald y a todas las demás familias afectadas por los cientos de secuestros en el país.