La nueva Siria a través de los ojos de una mujer cristiana

Después de casi 54 años con la familia Assad en el poder, Siria está atravesando grandes transformaciones con un nuevo gobierno. Juliette (pseudónimo), una cristiana que vive en el país, compartió sus perspectivas sobre los cambios que están ocurriendo. Lee a continuación su testimonio.

Los sirios siguen enfrentando grandes dificultades y el progreso es lento. Hay algunos problemas fundamentales que no se han resuelto en meses. Un ejemplo de ello es la electricidad, que sigue limitada a solo entre cuatro y seis horas al día. Los bancos también continúan impidiendo que algunas personas accedan a sus cuentas, incluso para retirar sus salarios.

La ayuda de Estados Unidos a programas humanitarios fue interrumpida, lo que afectó a muchas personas, incluyendo a quienes trabajaban en ONGs, y ahora están desempleadas. Varias familias que recibían pensiones por soldados que murieron en la guerra perdieron ese derecho durante la transición de gobierno.

Cristianos celebran a Jesús públicamente a pesar del miedo

En abril, un grupo aún no identificado intentó destruir una iglesia en la región de Bloudan. Arrojaron gasolina sobre las paredes, prendieron fuego y lanzaron dos bombas por la ventana. Gracias a Dios, esas bombas no explotaron.

Los vecinos, con ayuda de las fuerzas de seguridad, intentaron contener el incendio. Ese ataque me dejó en estado de shock. Me preocupa que esto vuelva a ocurrir en otra iglesia, tal vez durante un culto, cuando todavía haya personas dentro.

Aun así, los cristianos siguen celebrando su fe. En la mañana de Pascua, personas de todas las iglesias celebraron la resurrección de Jesús. Se escuchaban varios gritos de “¡Cristo está vivo!” en las calles.

Esta Pascua tuvo un ambiente de reconstrucción, con militares garantizando la seguridad en las iglesias y representantes del gobierno saludando a los líderes cristianos. “Cuando vinieron a saludarme, uno de ellos me miró con sorpresa, lo que me hace pensar que las autoridades podrían estar comenzando a entendernos”, dijo uno de los líderes cristianos.

Los conflictos armados aún son una realidad

A finales de abril, un mensaje de voz en redes sociales con contenido ofensivo hacia los musulmanes fue falsamente atribuido a la comunidad drusa. Grupos armados fueron hasta allí y mataron a varias personas.

El gobierno respondió restringiendo el acceso a la región, impidiendo la entrada y salida de cualquier persona. La situación escaló rápidamente, con bombardeos y disparos que impidieron a las fuerzas de seguridad mantener el control.

Soldados drusos intentaron defender a sus familias, pero unas 100 personas fueron asesinadas. Esa región también alberga a buena parte de la población cristiana, lo que encendió una alerta en nuestra comunidad.

En un pueblo llamado Sawara Al Kubra, grupos armados asaltaron y quemaron casas de cristianos. Cerca de 23 familias perdieron sus hogares y negocios, y alrededor de 80 personas se refugiaron en iglesias, porque no tienen a dónde ir. Todo esto muestra cuán frágil sigue siendo la situación en Siria.

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