Escenario de persecución a los cristianos rusos puede empeorar

Bajo la presidencia de Wladimir Putin, ex agente de la KGB, las restricciones al cristianismo y la iglesia cristiana son cada vez más introducidas en la legislación. El gobierno autoritario continúa restringiendo la libertad de religión y de otros derechos humanos.

Según informaciones de Víctor Ignatenkov, pastor cuyo abuelo – también pastor – fue asesinado por ser cristiano, la relación cercana del presidente Putin con la Iglesia Ortodoxa (considerada oficial en el país), ha ayudado a resucitar a la iglesia que fue masacrada por el Estado. ""Putin puede confesar la que quiere"", dijo Víctor. ""Pero lo que importa para nosotros, los que valoramos es que, como presidente, él mantiene una posición neutra. Nosotros no experimentamos limitaciones gubernamentales porque somos batistas"".

Pero ni todos los líderes de la iglesia pueden decir lo mismo. El gobierno se rehúsa a reconocer algunas religiones, lo que significa que la libertad religiosa es limitada. Un informe del Departamento de los EUA, el año pasado, criticó severamente a Rusia por su trato para con los grupos religiosos minoritarios, predominantemente cristianos.

Miembros de estos grupos pueden estar sujetos a leyes arbitrarias y a ser negados el acceso a locales de culto o visas para misioneros visitantes, dijo el informe. Algunos enfrentan violencia física.

El extremismo islámico ha sido otra fuente de persecución en el país. En las varias repúblicas en el norte de Cáucaso (Daguestán, Chechenia, Ingushetia, entre otras), extremistas musulmanes han luchado contra el ejército ruso a fin de establecer un emirato musulmán. Muchos rusos étnicos dejaron sus casas, debido a la violencia desatada en el área. Iglesias han perdido a sus miembros, o para la violencia de grupos radicales musulmanes, o por el miedo de declararse cristiano. Convertidos del islamismo están cada vez más arrinconados y mantienen su fe en secreto, por miedo a ser ejecutados.

Además de eso, la profundización de la división entre el Occidente y Rusia puede causar serios problemas a los cristianos. En una entrevista para la revista alemana Der Spiegel, en enero de este año, el ex líder soviético Mikhail Gorbachev dijo que está ‘verdaderamente preocupado’ con la relación entre Rusia y el Occidente. ""Nuevos muros están siendo construidos y la situación puede empeorar mucho"", relata.

Para Rolf Zeegers, analista de persecución de Open Doors Internacional, estas preocupaciones de Gorbachev son justificadas, pues la relación con el Occidente está deteriorándose y el país visa la restauración de la posición de potencia mundial, lo que choca con las ideas del Occidente. ""Será cada vez más difícil para los cristianos en ambos lados mantener contacto unos con los otros. En Rusia, las iglesias que mantienen contacto con ‘occidentales’, estarán bajo creciente vigilancia del Estado. Además de eso, denominaciones enteras estarán bajo sospechas de ser agentes extranjeros"", explica el analista.