Puertas Abiertas • 29 feb. 2020
En Somalia, muchos jóvenes sin perspectivas de vida se convierten en radicales islámicos. Con Yusuf, sucedió algo diferente (foto representativa)
Los cristianos de trasfondo musulmán son el grupo más grande entre los cristianos perseguidos y necesitan nuestra atención. Es glorioso saber que el Señor ha alcanzado a los musulmanes con su gracia y verdad. Sin embargo, necesitan ser apoyados para continuar en la jornada, ya que la mayoría de las veces la decisión de seguir a Cristo es acompañada por la persecución.
Por esta razón, muchos cristianos ex musulmanes prefieren mantener su fe en secreto, como es el caso Yusuf. Él es el cuarto hijo de la familia y, desde pequeño, siempre ha hecho lo que todo niño musulmán debe hacer: ir a la mezquita cinco veces al día para orar, ir a la escuela y recitar el Corán. El joven de 18 años explica: “No importa si eres o no inteligente, pero es obligatorio memorizar el Corán. No disfruté la infancia porque deportes como el fútbol fueron prohibidos y considerados satánicos debido a que los jugadores usaban pantalones cortos. Mientras los otros niños iban a jugar, nos vimos obligados a ir a la mezquita para memorizar el Corán o quedarnos en casa”.
Entérate: la realidad de la persecución en Somalia
Yusuf trató de ser un niño perfecto y desde temprana edad aprendió a odiar a los cristianos, creyendo que la Biblia era una mentira y que la palabra de Dios había sido corrompida. Estaba orgulloso de ser musulmán y se sentía muy superior a los cristianos. Luego dejó su ciudad natal para continuar sus estudios en una ciudad más grande.
De evangelista islámico a cristiano incondicional
En la escuela era un evangelista para el islam y recuerda: "Muchos vinieron, pero luego se fueron porque seguir todas las reglas resultaba muy difícil". Un poco más tarde, Yusuf se enfermó y tuvo que ser hospitalizado durante un mes. Su padre encontró una familia en la misma ciudad que la escuela para que Yusuf se quedara mientras se recuperaba. Lo que nadie sabía era que toda la familia seguía a Isa (Jesús, en árabe).
Mientras estaba con la familia que lo recibió, habló sobre religión durante tres días y, cuando regresó a la escuela, tomó algunos libros para leer y comprender la diferencia entre el islam y el cristianismo. Tenía que leerlos con discreción, ya que estaba rodeado de muchachos musulmanes que se estaban volviendo cada vez más radicales.
"Después de seis meses [comparando las enseñanzas del Corán y la Biblia], tuve que admitir que la Biblia era la verdadera palabra de Dios", reconoce. Después de tres meses fue bautizado y también pasó por el discipulado, todo sucedía en secreto. Yusuf explica: “Incluso hoy, mis padres no saben que me volví cristiano. Cuando regreso a casa, de vacaciones, me tratan como a un musulmán. Es difícil decirles porque los sorprendería; además, la comunidad los descuidaría y no quiero crearles ese tipo de problema”.
A pesar de los peligros y dificultades, Yusuf se mantiene firme en su decisión: “Antes, me preocupaba mucho mi futuro, pero después de aceptar a Jesús, sé que él tiene un buen plan para nosotros. Mi visión es convertirme en un embajador de Cristo para mi comunidad, para aquellos que nunca han escuchado la palabra de Dios”, concluye el joven cristiano.
Banco Estado | Nº 3477 1228 854
Misión Puertas Abiertas
RUT 65184324-3
Cuenta vista o Chequera Electrónica
Sucursal Tajamar
Casilla N° 261
Av. Providencia, 1466
Santiago - Chile
Teléfonos:
(+55) 11 99629-9010
(+56) 9 9968- 2161