Puertas Abiertas • 16 ago. 2018
Lorena en el centro de apoyo de Puertas Abiertas
Lorena * creció pensando que había sido abandonada por su padre y por Dios. El pastor Jasar *, padre de la niña, cumplía su llamado trabajando secretamente como misionero en ciudades en las regiones rurales del norte y el este de Colombia. En esos lugares, además de la prohibición de iglesias y evangelismo, los grupos armados ilegales perseguían a los cristianos. Debido al trabajo del pastor Jasar, actividades delictivas se concentraron contra la familia.
A los 10 años, Lorena fue secuestrada, y estuvo capturada por un día. Al día siguiente la llevaron a otro lugar, pero cuando llegó al terminal de autobuses, ella empezó a llorar y a gritar, llamando así la atención de la policía, que consiguió rescatarla. Después de esta situación, el pastor Jasar decidió dejarla en el centro para niños de las Puertas Abiertas en Colombia. En aquella época, ella no sabía que esta acción era para protegerla de las persecuciones que la familia enfrentaba. "Yo sólo sabía que estaba siendo separada de mi familia y eso me lastimaba mucho", explicó.
A lo largo de los años, Lorena fue protegida y cuidada. Sin embargo, la ausencia de su familia biológica dejó marcas en su corazón. Mientras estaba allí, aprendió a depender de Dios y comenzó a ser sanada por Él. "Una tarde estaba haciendo mis tareas y, de repente, vi un folleto. Cuando lo abrí, había un texto que contaba la historia de mi padre - las razones por las que yo estaba allí, las amenazas contra su vida y su sufrimiento por seguir a Cristo. En ese momento realmente descubrí quién era mi padre y pude entender que él siempre me amó ", compartió. Lorena entendió que Dios, su padre celestial, y Jasar, su padre terreno siempre la cuidaron, a pesar de la separación.
Después de algún tiempo, el pastor Jasar fue invitado por las Puertas Abiertas para compartir sobre sus experiencias en iglesias en Europa y Lorena fue llamada también. Así ella pudo encontrarse con él, sentir su amor y también el amor de Cristo, de forma plena. "Fue sorprendente escuchar de la boca de mi padre sobre sus experiencias y su amor por Jesús. Esto me permitió conocer más de Dios y me hizo entender mi propio llamado para servir a Cristo ".
Lorena está actualmente terminando la secundaria, y también trabaja en el abrigo. Ella sueña con ser misionera y compartir el amor de Dios con las demás personas.
* Nombres modificados para preservar la seguridad del cristiano perseguido.
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