Cuando la persecución está dentro de casa

Natasha es una cristiana ex musulmana de Malí que ha enfrentado, en la propia piel, la persecución y exclusión social durante las cuatro décadas que ha servido a Cristo. Su familia no aceptó su cambio de fe y dejó claro que ella ya no era bienvenida en su propia casa. Incluso después de casarse, la presión de los parientes continuó. Todo empeoró con la toma de Malí por islamistas radicales en 2012.

Uno de sus hijos, Alexander, fue secuestrado. Como él fingió ser sordo e incapaz de hablar, fue agredido y, poco después, suelto. Natasha cambió de casa, buscando la seguridad de la familia. Gracias a colaboradores de Puertas Abiertas, como tú, ella pudo pagar el alquiler de una casa y abrir un negocio propio. De esta forma, ella pudo sustentar a su familia.

Estos cambios en el país aumentan la preocupación que Natasha siente, principalmente con sus hijos. Alexander se quedó traumatizado con el secuestro y Jean trabaja para los musulmanes. Ella teme que ese contacto constante de Jean pueda confundirlo con respecto a su fe y que él termine aceptando al islam por miedo. Además, la familia sigue siendo presionada por vecinos musulmanes y, principalmente, por parientes.

Agradece al Señor por la fe de Natasha. Ora para que ella experimente la provisión de Dios y que pueda tener sabiduría al administrar el nuevo negocio. Pide al Espíritu Santo que trabaje en la vida de los parientes de Natasha y para que los corazones puedan abrirse a las verdades de Cristo. También presenta en oración a  Alexander y Jean, para que ellos puedan tener su fe consolidada en Jesús.

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