Una mujer es confinada en un centro de yoga para volver al hinduismo

Shweta logró escapar en agosto y contó que había por lo menos otras 65 mujeres detenidas ilegalmente junto con ella, todas por el mismo motivo: haberse casado con hombres de otras religiones diferentes al hinduismo. ""Había muchas mujeres que estaban confinadas desde hace años. La mayoría de ellas estaban enfermas y no recibían ningún tratamiento "", dijo. Según Shweta, las mujeres también eran acosadas sexualmente.

Una otra joven de Kerala, Athira, de 22 años, dio una conferencia de prensa en septiembre, en la que explicó por qué regresó al hinduismo después de haberse convertido al islam en julio, cuando dejó su casa. Ella dijo que fue visitada por miembros de la organización de caridad Arsha Vidya Samajam, que la llevaron a consejería en uno de los centros de yoga administrados por ellos.

En el caso de Shweta, la policía abrió una investigación, y una queja contra cinco personas que fueron identificadas, incluyendo el director del centro de yoga Siva Sakthi, también administrado por la organización de caridad Arsha Vidya Samajam. En los últimos cuatro años, esta entidad afirma haber reconvertido 2 mil mujeres que se habían convertido a otras religiones.

El Movimiento de Mujeres de India, el ala femenina del Partido Social Demócrata indio, dijo que todas las acciones de ese centro de yoga tienen la misma marca de las ceremonias hindúes en las que cuales las personas que se habían convertido a otras religiones son recibidas de vuelta al hinduismo.

El pasado mes, mujeres de diferentes iglesias de Kerala lanzaron el Movimiento de Mujeres Indias Cristianas. El propósito es ""cambiar creencias injustas, prácticas y estructuras que perpetúan el patriarcalismo y acentúan la explotación de mujeres. El movimiento actúa en las iglesias y en varios niveles de la sociedad"". Omana Matthew, presidente de la comisión de mujeres del Consejo de Iglesias de Kerala, dice que un aspecto que desencadenó la formación de ese movimiento fue la cuestión de la seguridad que enfrentan las mujeres, así como la discriminación y la falta de acceso al desarrollo personal.

El estado de Kerala tiene un alto índice de cristianos - alrededor del 20% de la población. Siete estados indios han prohibido por ley el proselitismo y ha habido esfuerzos para imponer las llamadas ""leyes anti-conversión"" a nivel nacional. Tal actitud puede llevar al aumento de ataques contra minorías religiosas, como cristianos y musulmanes, por parte de militantes que quieren que India se convierta en un Estado hindú.