Funeral de cristiano tibetano sirve de testimonio

Sunny es un joven líder cristiano de origen budista. Él y su padre sirvieron juntos en la iglesia, recibiendo entrenamiento y aliento de colaboradores de Puertas Abiertas en su región. Cuando el padre de Sunny murió, Sunny dio un testimonio sobre cómo se enfrentó a su familia para darle un funeral digno a su padre. En la cultura tibetana, los tíos son los responsables por el ceremonial fúnebre y ellos no compartían la misma fe.

Cuando el velorio terminó, uno de los tíos pidió el cuerpo del fallecido hermano para llevarlo de vuelta a la ciudad natal. Lo que significaba que, ciertamente, los parientes seguirían los rituales tradicionales, en adoración a los ídolos tibetanos.

Entonces, Sunny y la líder de su iglesia, Teresa, comenzaron a orar para que Dios los capacitara y guiara. Sunny trató con respeto a los tíos todo el tiempo, a pesar de no compartir la misma fe, lo cual tuvo un impacto positivo en sus parientes, quienes decidieron no seguir adelante con la forma tradicional de despedirse de su ser querido, y sí de una forma que le agradase a Dios. Teresa y Sunny agradecieron a Dios por responder sus oraciones.

Testigos del amor y la paz

Antes de que los parientes volvieran a sus casas, todos comieron juntos. A diferencia de las costumbres tibetanas, los cristianos encargaron platos simples y baratos, lo que dejó una impresión diferente. Mientras los hombres se despedían del fallecido, Teresa, junto a las mujeres de la iglesia, ayudaron a las hermanas de Sunny a arreglar la casa. Esto tocó el corazón de ellas, que agradecieron a los cristianos por haber conducido el funeral de forma que ellas ahorraron un buen dinero. Las hermanas de Sunny se interesaron por la Biblia y Teresa pretende visitarlas. Lo que dejó a los cristianos más felices es que la familia de Sunny entendió la certeza de que el padre de Sunny había ido al cielo, lo que no es una garantía en la creencia budista.

De los 97,2 millones de cristianos en China, sólo unos cientos son ex budistas de grupos étnicos minoritarios. Viviendo en el oeste del país, son uno de los grupos más perseguidos, no sólo debido a restricciones religiosas, sino porque enfrentan persecución dentro de la propia familia y comunidad. Las sanciones por convertirse al cristianismo van de agresión física, confinamiento, hasta la expulsión de la familia. Puertas Abiertas apoya esta parte de la Iglesia Perseguida a través de estudios bíblicos y asistencia práctica. Ora por los cristianos ex budistas en China.