Cristianos mexicanos enfrentan crisis humanitaria

Un informe publicado en julio por el ICG (Grupo Internacional de Crisis en inglés), deportaciones masivas de migrantes procedentes de Centroamérica a México y Estados Unidos llevaron a los mexicanos a una crisis humanitaria de grandes proporciones. El control de seguridad que actúa en las fronteras obliga a los extranjeros a caer en manos de traficantes de seres humanos y otros grupos criminales.

La misma situación también se extendió a El Salvador, Guatemala y Honduras. Hasta el momento, se sabe que los gobiernos están haciendo caso omiso a la dimensión del problema y, de acuerdo con el informe del ICG, sólo México y Estados Unidos aplican una política de migración en combinación con programas de lucha contra la pobreza y la falta de seguridad pública.

Para los cristianos mexicanos, esta situación también es un desafío importante. Por lo general, las iglesias son las primeras en abrir sus puertas a la gente desesperada. Pero el cristianismo en México no es libre para actuar a favor de los ciudadanos, ya que el país ocupa el puesto 40 en la Lista Mundial de la Persecución Religiosa 2016. Hay muchas familias cristianas que tuvieron que abandonar sus aldeas a causa de la fe. El narcotráfico en el país ha afectado considerablemente la iglesia. La crisis humanitaria es otro de los retos que los fieles tendrán que enfrentar. Ore por esta nación.