Puertas Abiertas • 15 ago. 2016
Un cristiano argelino fue condenado a cinco años de prisión, que es la pena máxima por blasfemia de acuerdo con las leyes de Argelia. Además de eso, el tendrá que pagar una multa de alto valor por haber ofendido supuestamente el Islam y el profeta Mahoma en un mensaje divulgado en las redes sociales, junto con la foto de un civil siendo ejecutado por extremistas islámicos. Slimane Bouhafs*, de 49 años, continúa preso y tuvo que comparecer ante un juez el día 7 de agosto, en la ciudad oriental de Setif, en la región montañosa de Cabilia. La prisión sucedió en julio, con la alegación de que él escribió un texto que decía que “la luz de Jesús brilla sobre las mentiras del Islam y de su profeta”.
El Vice-Presidente de la Liga Argelina para la Defensa de los Derechos Humanaos (LADDH) dijo que la sentencia es un verdadero ataque contra las garantías de la libertad de consciencia y de culto. Él intentó alterar la opinión pública alertando que los derechos garantizados por las leyes nacionales deben ser respetados. Tales comentarios en las redes sociales son mucho comunes en el país y no suelen despertar la ira de las autoridades. La LADDH pidió la libertad incondicional de Bouhafs y espera que la justicia triunfe. El presidente de la Iglesia Protestante de Argelia dijo que su abogado va apelar.
Se cree que la sentencia pesada sobre Bouhafs puede haber sido una forma de silenciarlo por causa de su activismo político. Él hace parte del Movimiento para la Autodeterminación de Cabilia (MAK – sigla en inglés), un grupo separatista no tolerado por el gobierno y que defiende la minoría cristiana de Argelia. La comunidad es compuesta por los bereberes (pueblo que se denomina como “hombres libres”), que son conocidos por la fuerte identidad y resistencia regional contra todas las formas de control. Todo el resto de Argelia es habitado por árabes.
Por otro lado, la familia del acusado denunció la acción de la justicia argelina como un “sham litigation”, que es lo mismo que decir “mala fe de forma sofisticada”, o sea, el abuso del derecho de la acción judicial para perjudicar a alguien. Bouhafs se convirtió al cristianismo en el año 1996. Su hija Afaf* lo describe como “un hombre que siempre defendió los intereses de su país” y dijo que su padre es conocido como alguien que tiene compromiso con la democracia y que lucha por la libertad religiosa. La mayor preocupación de la familia actualmente es su salud. Bouhafs sufre de una enfermedad crónica y su salud puede empeorar mientras está en la prisión. Él tiene reumatismo que empeora en situaciones de stress y necesita seguir una dieta especial.
*Nombres alterados por motivos de seguridad.
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