Cristiano perseguido encuentra fuerza en la iglesia

En África Oriental o África del Este, dejar el Islam por Jesucristo tiene grandes consecuencias. Pero, a pesar de ello, el número de cristianos ex musulmanes ha aumentado considerablemente. Hace poco, Puertas Abiertas estuvo en la región para auxiliar a cristianos perseguidos y conoció a Awel*, ex líder musulmán que enfrenta la consecuencia de su decisión por Cristo.

Un día, cuando estaba muy enfermo, Awel recibió una visita de un grupo de cristianos en el hospital. Allí escuchó sobre el Evangelio por la primera vez y oró junto con aquellos hermanos. En la misma noche, él tuvo un sueño en el cual un hombre hermoso y resplandeciente le decía: ""Yo soy Jesús, yo soy la paz verdadera"". Awel decidió entregar su vida a Cristo y algó mudó en su corazón. Él fue totalmente curado.

Feliz con su nueva fe, Awel comenzó a congregarse con unos hermanos para estudiar la Palabra y compartir las buenas nuevas de salvación. Cuando sus vecinos se enteraron, lo acusaron de estar loco y de ser muy peligroso. Entonces,oficiales de la polícia lo detuvieron, lo golpearon y lo hicieron andar por siete horas cargando un saco con 20 kilos de maíz, mientras lo golpeaban sin parar. La persecución comenzó a crecer. Awel fue insultado y agredido por sus familiares. Poco tiempo después, su esposa no aguantó y lo abandonó llevándose consigo a sus hijos y pertenencias.

Aún así, Awel persevera en la fe y se siente afortunado en ser parte del cuerpo de Cristo, y está muy agradecido por todo el apoyo que ha recibido de los hermanos y de Puertas Abiertas. ""La mejor cura es la cura del alma. La salvación nos ha unido: hermanos de mi región, de mi país y ustedes, de tantos otros países oran por mí y me apoyan. Encontrar a Jesús me ha acercado a la iglesia para tener comunión con otros cristianos. ¡Y eso es maravilloso!"", afirma.

* Por motivo de seguridad, el nombre ha sido cambiado.