Puertas Abiertas • 13 abr. 2021
Naida recibe y visita a familiares, amigos y vecinos durante el Ramadán y aprovecha para compartir sobre Jesús (foto representativa)
Desde muy joven, Naida* solía celebrar el periodo de Ramadán con su familia en Asia Central. Visitaba a los vecinos, a los parientes, a los amigos y también recibía invitados en su casa. Como buena musulmana, se enfureció cuando sus hijos tuvieron un encuentro con Jesús en los años 90.
"Para ser sincera, me preocupaba su seguridad porque teníamos muchos familiares y todos eran musulmanes. Pensé que mis hijos podrían ser agredidos o incluso asesinados por su padre o sus tíos", revela.
El miedo a la violencia no es infundado, ya que Naida fue víctima de palizas por parte de su marido. En aquella época, la Unión Soviética se estaba derrumbando y la familia tenía muchos problemas económicos. "Debido a mi miedo, me convertí en la principal fuente de acoso para mis hijos. Intenté evitar que fueran a la iglesia y les obligue a quedarse en casa. Tiré libros cristianos y Biblias, los amenacé e incluso los agredí sólo para obligarlos a volver a ser musulmanes. No creía que Dios les protegía", admite.
Un encuentro con Cristo a través del dolor
Pero en el 2009, Naida enfermó y ningún médico, medicina o terapia pudo resolver su problema: "Me sentí agotada después de toda esta búsqueda por cura. No tenía esperanza de mejorar, los médicos no podían ayudarme". Fue entonces cuando sus hijos se reunieron y oraron a Jesús por la recuperación de su madre. La anciana, que hoy tiene 70 años, descubrió la diferencia que marcaba Cristo en la vida de sus hijos después de su conversión y comprendió que sólo él podía curarla.
"Desde entonces mi vida ha cambiado por completo. Mi estado físico mejoró mucho y los médicos no podían entender por qué. Mi vida emocional y espiritual se han restaurado", concluye Naida.
¿Cómo evangelizar durante el Ramadán?
Sin embargo, la cristiana ex musulmana estaba a punto de enfrentarse a un gran reto: ser un seguidor de Jesús en un país de mayoría musulmana durante el Ramadán. Durante mucho tiempo no celebró la fecha y por ello se ganó la antipatía de familiares, amigos y vecinos. Pero, ella anhelaba la oportunidad de compartir sobre Jesús con todos los que la rodeaban.
Así que Naida comenzó a orar y a pedir la dirección de Dios para actuar especialmente durante el Ramadán. Leyó muchos libros sobre el tema, habló con su pastor y comprendió que la cultura podía ser una forma de alcanzar a otros para Cristo. Así que se dedicó a celebrar la ocasión cocinando platos tradicionales y especiales del Ramadán e invitando a familiares y vecinos a cerrar el ayuno en su casa.
También empezó a visitarlos durante el Ramadán y mostró respeto por sus creencias y tradiciones. Así pudo tocar sus corazones y compartir el evangelio durante las cenas. A pesar de que la pandemia interfirió en gran medida con la celebración islámica de 2020, Naida invitó a un vecino musulmán a cenar a su casa y la conversación tuvo a Jesús como tema principal.
*Nombre alterado por seguridad.
A continuación un mapa de oración con peticiones para cada día del Ramadán (para ver la lista con los días de oración haz clic en el icono junto a "Ramadán - 1 mes de oración").
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