Enfermera cristiana todavía no ha sido encontrada

Ya han pasado más de dos meses desde que una cristiana colombiana fue secuestrada en el sur de Malí, una región del país considerada relativamente segura y que todavía no se vio afectada por los ataques islámicos. Gloria Argoti fue detenida en la villa de Karangasso, cerca de la frontera de Burkina Faso y llevada en un vehículo de la propia iglesia. Hasta el momento no hay noticias de su paradero y las fuerzas de seguridad continúan con las búsquedas.

Mientras tanto, en la pequeña villa, «el sentimiento es de inquietud y angustia», describió el líder cristiano Basile Dembele. «La hermana Gloria vive aquí hace seis años y siempre cuidó de los huérfanos. En el momento, con lo que ha ocurrido, tuvimos que cerrar el orfanato», dijo Dembele. Él también cuenta que las actividades en el taller de costura fueron interrumpidas, entre otros trabajos de la iglesia que se vieron afectados. Según el líder, los niños están viviendo en un local seguro.

El secuestro de Gloria fue una sorpresa para esta pequeña comunidad, ya que nunca había ocurrido un incidente semejante en esta región. Fuentes locales aseguran que los extranjeros podían vivir y viajar con seguridad. Los acontecimientos actuales sugieren que el alcance de los militantes está aumentando rápidamente.

«Las reuniones de oración se organizan regularmente, en todas las comunidades, por nuestra querida hermana. Que Dios pueda tocar los corazones de los secuestradores, dijo Dembele. Radios locales también están colaborando en esta campaña, además de la distribución de folletos y afiches. «Cuanto más pasa el tiempo, más larga es nuestra espera. Estamos orando con fe y esperanza, para que vuelva sana y salva», decía uno de los afiches. Ore también por el retorno de Gloria.